sábado, 28 de enero de 2023

La flor del rayo

 Cuando Oprah Winfrey lanzó aquellas cinco preguntas a Lance Armstrong le advirtió: sólo responde sí o no. Y de la boca de Armstrong salieron cinco síes que confirmaban su dopaje en los Tours que había ganado. Entonces, uno de sus periodistas de cámara, uno de los que había defendido la honestidad del tejano hasta la fatídica entrevista escribió un artículo durísimo que tituló: Todo fue mentira.

Con Juan Manuel Gil temo que llegue un día en el que confiese que sus novelas no son ficción y que el titular sea: Todo fue verdad.

Acabo de leer La flor del rayo, y vuelve lo de siempre con Juanma Gil. Teje una cortina imaginaria entre realidad y ficción y nunca sabes en qué lado estás. Eso en el mejor de los casos, porque a veces dudas de que esa cortina exista. Es un maestro en atraparte. Lo hace con una naturalidad tremenda, como los que hacen magia de cerca: pim pam, esta era tu firma? pues la rompo, mira en tu bolsillo; oh! la carta con tu firma!! pero tú me habías visto romperla, no? y cómo apareció en tu bolsillo? 

Entonces te entran una ganas tremendas de llamarle para preguntar qué coño está haciendo y qué está pasando... pero eso ya lo hace su madre en la novela. 

Fui a Youtube para ver alguna entrevista sobre esta novela y evidentemente tiene el mensaje totalmente fijado; lo cual me hace pensar en que se le va a hacer dura la promoción del libro porque cada vez son más las preguntas que le van asediar.

Así que resuelto (¿resuelto?) el tema de la verdad y la ficción, la vida y la novela, tendríamos que preguntarnos qué hay en el libro. Bueno, tres historias duras y un personaje irritante. Hay hachazos de humor con los que ríes si es la primera vez que lees a Juanma Gil. Si ya llevas más de dos novelas suyas... seguramente estés atrapado en su delirio y en su pose de perro incomprendido y los diálogos te lleven más a la tensión que a la risa. Lo cual le convierte en un autor temible. Ojo ahí, te va atrapar.

Con el tiempo ha ido puliendo la estructura de cómo cuenta las cosas, esa manera de sacar la escultura de la piedra cambiando la zona de impacto según él quiere, y de verdad hay varios momentos en los que la emoción surge de la literatura en sí misma, de la estructura, de la manera de cambiar de escena o personaje. Es brutal en eso. Hay que parar de leer para respirar.

Es un gran cabrón. Es un escritorazo. Os dejo un frase que está en boca de uno de los personajes de la novela: "Toma una decisión y no vivas contra ella" 

Ovación para Juanma Gil. 

miércoles, 18 de enero de 2023

arena VIII

 I. sonia se ha cabreado conmigo después de una conversación que empezó ella sin que nadie se lo pidiera.

- quien mejor me conoce es x, me dice sonia.

- pero te separaste de él, no?

- sí, no le aguantaba.

- a él o a tí?

se lo pregunté porque a veces la gente manda a su pareja a la mierda porque no se sosportan a sí mismos, y por tanto no quieren espejos. y las parejas, cuando te conocen bien, lo son. así que tiendes a romper el espejo porque es difícil partirse la cara a uno mismo. cuando sonia se va (cabreada, como si yo tuviera culpa de algo!) miro a alba. a alba la habría hecho añicos yo, tenía todo para triunfar conmigo.

II. otro puñadito de arena pal cuerpo, venga.

III. ¿por qué estamos anotando las temperaturas del desierto? bueno, está claro que cuando el clima cambió para siempre, después de aquella inundación masiva, el desierto fue el depositario de la verdad, y hay una teoría que dice que si algo va a levantarse para recuperar el planeta que conocimos, lo hará en el desierto. quizá sea el desierto en sí mismo quien haga el primer gran movimiento de la partida. así que medimos concienzudamente en intervalos precisos la temperatura y el estado de composición de la arena para ver tendencias. como si tuviéramos al desierto en una cama de vigilancia intensiva, lleno de cables, con tubos por cada orificio, respirador artificial... así estamos. eso en teoría, claro; porque hubo un error de cálculo que hace que las cosas no se ejecuten como estaba previsto. a eso le hemos llamado la gran cagada. a mi me da absolutamente igual.

IV. a las chicas y al matemático, no.

martes, 17 de enero de 2023

arena VII

 I. las tres últimas crónicas que he escrito desde aquí han gustado. . por supuesto me he inventado todo. he puesto los datos que convenían al relato, he escrito lo que querían leer, por lo que me pagan. a la gente le gusta la ficción. imaginan empresas y creen que se cumpl su realidad. si hubiese escrito la verdad... bueno, qué cojones la verdad! si hubiera escrito lo que he visto me habrían mandado de vuelta a casa, habría perdido el trabajo y sobre todo la posibilidad de morir aquí, que es el fin último.

II. alba, la rubia con la que me lié antes de venir. ella creía que me había enamorado. ana, la chica bajita. casi siempre va con la camisa vaquera que llevaba cuando nos presentaron. me pareció muy amable. debo recordar eso: ana, amable. alba, la rubia (está dolida conmigo)

III. está también el matemático. no sé cómo se llama, no es que no me acuerde, es que no lo sé y desde que estamos aquí no ha coincidido que alguien haya dicho su nombre en alto. la otra chica, la morena alta... tampoco me acuerdo de su nombre. ah, sí: sonia. sonia, la morena alta que no es la que lleva la camisa azul del día que nos presentaron; esa es... (lo tengo que mirar) ana!

IV. he decidido anotar este tipo de cosas. lo hago en la última hoja de la libreta de los termómetros... dejando una en blanco. o sea, la penúltima hoja. creo que se entiende. cuando entregue la libreta sólo habrá un problema. alguien verá que he arrancado esa hoja y creerán que ahí había lecturas de temperaturas y empezarán las teorías conspiranoicas.



lunes, 16 de enero de 2023

arena VI

 I. para nuestra sorpresa hoy ha sido un buen día.

II. estoy perdiendo la memoria de manera angustiosa. se la come la tierra. estoy convencido. es un efecto directo a que cada día yo trague uno o dos puñados de arena. ahí se quedan luego las cosas que debo recordar y sobre todo

III. también algunas cosas se están ralentizando. los nombres. eso es tremendo. no recuerdo prácticamente ninguno. los de la familia no son problema porque no me hablo con nadie. pero los de la gente que tengo alrededor... es una vergüenza contínua. la puta tierra.

IV sonia ha venido hoy en plan simpático. creo que se llama sonia. no os fiéis de los nombres que escribo aquí. puede que no coincidan con los de las personas a las que me refiero. me recomienda un libro que dice que a ella le hizo mucho bien, la puso en sintonía con la vida. sólo con decirme eso ya me estaba diagnosticando. me he puesto de mala hostia.  la he mirado mal, lo sé, pero qué esperaba. a nadie le gusta que le digan que es un antisocial y que debe hacer algo para remediarlo. luego le he soltado: yo sólo leo termómetros, por eso estamos aquí.

miércoles, 11 de enero de 2023

arena V

 I. anoche no dormimos. nos cogió desprevenidos una tormenta solar. a mi me dió por vomitar, pero increíblemente lo que salía de mi cuerpo era líquido. solo como tierra y al vomitar sale líquido, vamos: no me jodas

II. en plena tormenta solar ana y sonia se pusieron a cuchichear. nada nuevo, pero una mirada furtiva de ana me puso en sobreaviso. está claro que no se fían de mi y que no van a hacer nada por suavizar la situación; aunque eso es justamente lo que me mantiene con vida en mi objetivo de morir aquí.

III. sé que no se entiende bien y que parezco un guay o un gilipollas. siempre ha sido así. pero lo repito. cada vez que leáis algo de esta movida debéis tenerlo claro: mi objetivo único aquí es morir. da igual lo que yo mismo os diga o lo que ocurra. 



domingo, 8 de enero de 2023

arena IV

 I. ya me han avisado de que llega más dinero y por lo tanto pronto tendremos aquí mejores equipos. me lo dicen como si fuera una buena noticia. "prepárate para escribir a raudales!" pero qué coño! yo he venido aquí y lo único que quiero es morir.

II. vale. disimularé.

III. sonia llega con los pies reventados por la arena caliente. está desencajada; cada vez funcionan menos termómetros. "así no podemos hacer nada". le cuento lo del dinero y se queda quieta. más dinero. más equipos. veo que intenta encontrar la respiración. cae al suelo. se ha desmayado pero yo no puedo hacer nada. que cada uno solucione sus problemas. cojo un puñado de tierra del suelo y lo como. a veces lo hago así.