miércoles, 14 de noviembre de 2012
harrison
bailaron mientras pudieron y luego, antes de desmayarse, se miraron sin comprender nada de aquel absurdo. los toldos estaban rajados por el viento. no era verano, pero aún recogidos ya se sabía que estaban rajados. es un hecho que el silencio no existe. existe el whisky y el tabaco, pero el silencio no. suenan hasta las nubes. suena george harrison y su jardín, la guitarra afilada. la dulzura; y el empeño en la noche. el traje blanco. bob marley en la televisión y ese concierto. suena noviembre. las habitaciones con cortinas. suenan los paréntesis con un eco de horas alargadas. ringo star. dos bateristas tocando a la vez. eric clapton diciendo estoy enamorado de tu mujer. una emoción exagerada que evita las horas muertas del alargue. i don't know how. es jueves. es ya. es hoy. es todo lo que sabemos. perros ladrando.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario